martes, 9 de febrero de 2010

Pasional Bilbao

Pasional.mp3


Texto:Sergio Oiarzabal
Voz: MÓNIKA Nude



Podría matarte. Sé a qué hora sales y a qué hora regresas a tu casa de alivio fingido cada día. Descubro el perfume a esencia firme de tus entrañas en cualquier otro recuerdo. Si te mirara a los ojos, si me leyeras los labios, soñarías con la escultura de mi intención última y no sería necesaria siquiera, la frente del cielo amaneciendo al delirio de un otoño. Podría matarte. Susurro tu alma en mitad de la calle y al volver la cabeza hacia mi voz condenada, ves tan sólo niñas desnudas enterrando sus muñecas negras. Podría matarte. Cada noche te lamo la boca mientras duermes, tú no lo sabes, y dejo sobre tu vientre una vela morada encendida que habrá de consumirse antes de que amanezca, antes, porque ella, insondable y pura, le pertenece al viento. Podría matarte.Hacer resbalar por mi silencio envenenada, una lágrima de anciano hasta el círculo vicioso de tu copa de sangres prohibidas, acaso como la prueba más fehaciente que delate mi presencia y su sombra en armas por una ingobernable patria sin raíces. Podría matarte. Aguardar el suspiro que abrase todos los puentes definitivos en esta lengua de mazmorra y al fin poder gemirte al oído mientras duermes, oscuramente bella, tú no lo sabes, la música inviolable del resurgir del mejor de los pecados. Podría matarte. Decir con odio de viejo amante cuánto te amo, mientras sueñas clamor y triunfo en los palacios tomados, para que jamás tengas memoria de ello, para que sólo recuerdes al despertar pájaros de huesos volando sobre tu infancia, para que así parezca que no has vivido. podría matarte. lapidar mientras duermes la ventana y las puertas de tu alcoba y arrojar serpientes a los pies de tu cama antes de colocar un último ladrillo de oro y escuchar después, sin olvido, tras las paredes, cada una de tus palabras en vigilia, avivándose como el incendio en las catedrales del cielo, cegadas de barrios bajos, perdidamente, hasta el alarido más desamparado del abandono. Podría matarte.

jueves, 4 de febrero de 2010

La palabra




Desdeñarás tu verbo, el que no te ha aplacado;
no amarás como un hijo el canto que entregaste.
En cada uno de ellos, hombre, te traicionaste,
dijiste otro mensaje, y no el tuyo, sagrado.

Mejor expresa el alma del granado su fruta
de frenesí; mejor, la pluma azafranada
del faisán de oro, dice su Persia apasionada,
y mejor dice el polvo la gran sed de la ruta.

Y mejor todavía, las madre-perlas, duras,
tornasoladas como los ojos de Proteo,
y la medusa que muda como el deseo,
dicen al mar y son sus fieles criaturas.

Hiciste tu palabra con tu carne más roja
y te dolió arrancar su almendra ensangrentada.
El canto fue la médula de tus huesos volteada;
pero, fuera de ti, tu canción es tu mofa.

No tiembla como tiembla tu boca con jadeo
y no entrega la rima tu entrechocar de dientes.
Se muere el canto, como la salamandra ardiente,
saliendo de tu entraña, torcida de deseo.

Gabriela Mistral, del libro inédito Almácigo.

Musicalizado por Manuel Sánchez



miércoles, 3 de febrero de 2010

Le déserteur




Monsieur le Président
Je vous fais une lettre
Que vous lirez peut-être
Si vous avez le temps
Je viens de recevoir
Mes papiers militaires
Pour partir à la guerre
Avant mercredi soir
Monsieur le Président
Je ne veux pas la faire
Je ne suis pas sur terre
Pour tuer des pauvres gens
C'est pas pour vous fâcher
Il faut que je vous dise
Ma décision est prise
Je m'en vais déserter

Depuis que je suis né
J'ai vu mourir mon père
J'ai vu partir mes frères
Et pleurer mes enfants
Ma mère a tant souffert
Elle est dedans sa tombe
Et se moque des bombes
Et se moque des vers
Quand j'étais prisonnier
On m'a volé ma femme
On m'a volé mon âme
Et tout mon cher passé
Demain de bon matin
Je fermerai ma porte
Au nez des années mortes
J'irai sur les chemins

Je mendierai ma vie
Sur les routes de France
De Bretagne en Provence
Et je dirai aux gens:
Refusez d'obéir
Refusez de la faire
N'allez pas à la guerre
Refusez de partir
S'il faut donner son sang
Allez donner le vôtre
Vous êtes bon apôtre
Monsieur le Président
Si vous me poursuivez
Prévenez vos gendarmes
Que je n'aurai pas d'armes
Et qu'ils pourront tirer

Boris Vian

Le déserteur en Wikipedia



Serge Reggiani recita Le dormeur du val de Rimbaud, y después canta Le déserteur:




EL DESERTOR

Señor Presidente
Le escribo solo estas letras,
que a lo mejor hasta lee,
si tiene tiempo pa' ello.
Recibo en este momento
mis papeles militares
para irme a la guerra
Antes del miércoles tarde.
Señor Presidente,
Pero yo no quiero hacerla.
yo no estoy aquí en la Tierra
pa' matar a unos probes hombres.
Me da igual que usted se enfade
por lo que vengo a decirle.
Mi decisión es tomada,
ya que voy a desertar.

El día en que nací,
he visto a mi padre morir,
a mis hermanos marchar,
y vi a mis hijos llorar.
Cuando me metieron preso,
me robaron la mujer,
y me robaron la fe
con sus recuerdos queridos.
Y de haber sufrido tanto
mi madre se fue a la tumba
lo mismo le dan ya bombas
lo mismo le dan las larvas.
Mañana, de madrugada,
yo mi puerta cerraré
en narices de años muertos.
Y saldré por los caminos.

Y mendigaré mi vida
por los caminos de Francia,
desde Bretaña a Provenza,
y a la gente le diré :
"No debéis obedecer,
no debéis hacer la guerra,
y no cojáis el petate,
ni vayáis hacia el cuartel."
Si hubiera que dar la sangre,
vaya usted y de la suya
ya que buen apóstol es,
Señor Presidente.
Por si me quiere buscar,
dé este aviso a sus gendarmes
de que no llevaré armas
y que podrán disparar.

Versión literal de Marcelo Saenz Rojos

domingo, 24 de enero de 2010

En estos días




En estos días, todo el viento del mundo sopla en tu dirección
La osa mayor corrige la punta de su cola
Y te corona con la estrella que guía: la mía

Los mares se han torcido con no poco dolor hacia tus costas
La lluvia dibuja en tu cabeza la sed de millones de árboles
Las flores te maldicen muriendo, celosas

En estos días no sale el sol, sino tu rostro
Y en el silencio, sordo del tiempo, gritan tus ojos
¡Ay!, de estos días terribles
¡Ay!, de lo indescriptible

En estos días no hay absolución posible para el hombre
Para el feroz, la fiera que ruge y canta ciega
Ese animal remoto que devora y devora primaveras

En estos días no sale el sol, sino tu rostro
Y en el silencio, sordo del tiempo, gritan tus ojos
¡Ay!, de estos días terribles
¡Ay!, del nombre que lleven
¡Ay!, de cuantos se marchen
¡Ay!, de cuantos se queden

¡Ay!, de todas las cosas
Que hinchan este segundo
¡Ay!, de estos días terribles
Asesinos del mundo

Silvio Rodríguez.




Compra el disco

jueves, 14 de enero de 2010

Canción del verano


Canción del Verano

Jose Blanco | Vídeos musicales MySpace





Como el verano he nacido
para el sueño y el placer
para madurar los soles
hasta recoger su almíbar

como el verano he nacido
para el jugo y la alegría
para albergar un enjambre
de luciérnagas fugaces
en noche imperecedera

como el verano he nacido
para aquilatar las pieles
para atusar cabelleras
y dilatar las pupilas
donde fijar residencia

como el verano he nacido
para olvidar las promesas
que hiciera la primavera
las promesas son cansancio
un disfraz del corazón
afanado en devorar
las heces de su letargo

como el verano he nacido
para el aquí y el ahora
para enmudecer los grillos
cuando la sangre se adensa
y con dulzura imposible
el cielo acama la hierba

como el verano he nacido
para el eterno retorno
mas si el deseo no vuelve
quizá el amor sobreviva
al clamor de las cigarras.


José Blanco
(Del libro Las nubes, Ed. Baile del Sol, Tenerife, 2006)

miércoles, 30 de diciembre de 2009

C A N T A R


CANTAR

Javier Aguirre Ortiz | Vídeos musicales MySpace




Si aún me dejas que siga cantando

es que quieres que siga viviendo

cantaré mientras viva tu vida

por mi sangre cantando y batiendo

si no niegas mis versos entonces

es que puedo seguir escribiéndote

es que puedo entregarte mi sangre

es que puedo sentir tu silencio

si no niegas mis versos entonces

es que bebes la sangre que soy

Javier Aguirre Ortiz




Óscar Distéfano, poeta y músico paraguayo, ha musicalizado este poema que hace tanto tiempo que quería ser canción. Desde aquí le manifestamos nuestro profundo agradecimiento. El video se lo debemos a Ricardo Serna -gracias!!

jueves, 24 de diciembre de 2009

Chanson de l'hippocampe - Caballito de mar



petit cheval hors du temps enfui
bravant les lès du vent et la vague et le sable turbulent
petit cheval
dos cambré que salpêtre le vent
tête basse vers le cri des juments
petit cheval sans nageoire
sans mémoire
débris de fin de course et sédition de continents
fier petit cheval têtu d’amours supputées
mal arrachés au sifflement des mares

un jour rétif
nous t’enfourcherons

et tu galoperas petit cheval
sans peur
vrai dans le vent le sel et le varech

(Aimé Césaire, Moi, laminaire…, 1982)

  


Descarga aquí el album -gratis, legal.

caballito fuera del tiempo huído
haciendo frente al viento y a la ola y la arena turbulenta
caballito
espalda arqueada que mezcla con salitre el viento
cabeza baja hacia el grito de las yeguas
pequeño caballo sin aleta
sin memoria
ruina de final de la carrera y sedición de continentes
caballito orgulloso testarudo de amores calculados
mal arrancados al silbido de las charcas

un día reacio
te atravesaremos

y tú galoparás caballito
sin miedo
verdadero en el viento la sal y el quelpo

(Gustado Césaire, Yo, laminar…, 1982)

lunes, 21 de diciembre de 2009

Llueve de memoria




Hoy llueve de perfil.
Casi a tientas
y con las feromonas a pleno rendimiento.
Llueve sencillo. A mano.

Llueve como llovía hace un minuto.
Como quiere llover
cualquier domingo.
A expensas del cristal y las arañas

Llueve de lejos
y llueve de mentira, con la sed
despistada
de un mes de primavera.

Llueve sin preguntar.
Como llueve la muerte de un suspiro
o el testamento huérfano
de un poema mediático.

Hoy llueve como tiene que llover.
Sin ningún apetito de victoria
que se parezca a aquel
con el que tú diluvias cuando te echo de menos.

Antolín Amador
(Del libro "Las letras pequeñas")

Musicalizado e interpretado por : José Luis Villalta

sábado, 19 de diciembre de 2009

Villancico






Ya está el niño en el portal
que nació en la porteria,
San José tiene taller,
y es la portera Maria.

Vengan sabios y doctores
a consultarle sus dudas,
el niño sabelotodo
está esperando en la cuna.

Dice que pecado es
hablar mal de los vecinos
y que pecado no es
besarse por los caminos.

Que se acerquen los pastores
que me divierten un rato
que se acerquen los humildes,
que se alejen los beatos.

Que pase la Magdalena,
que venga San Agustín,
que esperen los reyes magos
que les tengo que escribir.

Gloria Fuertes

Hator hator



Hator, hator mutil etxera
gaztaina ximelak jatera,
Gabon gaua ospatutzeko
aitaren eta amaren ondoan.
Ikusiko duk aita barrezka
amaren poz ta atseginez.

Eragiok, mutil, aurreko danbolin horri.
Gaztainak erre artean,
gaztainak erre artean,
txipli txapla, pum!

Gabon gaua pozik igaro daigun.



Ven muchacho a casa ven
a comer castañas pilongas,
a celebrar la nochebuena
junto al padre y la madre.
Verás al padre reír
con la alegria y dicha de la madre.

Muchacho dale a ese tamboril
mientras se tuestan las castañas,
mientras se tuestan las castañas,
¡txipli txapla pun!

Que pasemos una feliz nochebuena.

Haurtxo Seaskan




Haurtxo polita seaskan dago
zapi zuritan txit bero.
Haurtxo polita seaskan dago
zapi zuritan txit bero.
Amonak dio, Ene potxolo!
Arren egin ba lo, lo!
Amonak dio, Ene potxolo!
Arren egin ba lo, lo!

Txakur handia etorriko da
Zuk ez badeza egiten lo.
Txakur handia etorriko da
Zuk ez badezu egiten lo.
Horregatik ba Ene potxolo!
Egin aguro lo, lo, lo
Horregatik ba, ene potxolo!
Egin aguro lo, lo, lo




El niño hermoso está en la cuna,
caliente entre los paños blancos.
Dice la abuela, ¡mi pocholito!
Duérmete ya, duérmete pronto.

Vendrá un perrote si no te duermes.
Duerme por eso, mi pocholito,
duérmete ya, duérmete pronto.

Stille Nacht



Music: Franz Xaver Gruber, 1818
Words: Joseph Mohr, 1816/1818

Stille Nacht, heilige Nacht,
Alles schläft; einsam wacht
Nur das traute hochheilige Paar.
Holder Knabe im lockigen Haar,
Schlaf in himmlischer Ruh!
Schlaf in himmlischer Ruh!

Stille Nacht, heilige Nacht,
Hirten erst kundgemacht
Durch der Engel Halleluja,
Tönt es laut von fern und nah:
Christ, der Retter ist da!
Christ, der Retter ist da!

Stille Nacht, heilige Nacht,
Gottes Sohn, o wie lacht
Lieb' aus deinem göttlichen Mund,
Da uns schlägt die rettende Stund'.
Christ, in deiner Geburt!
Christ, in deiner Geburt!



Hoy se cantan las estrofas 1, 6 y 2 (arriba) de la versión original de Mohr.
Heute singt man nur die Strophen 1, 6 und 2 (oben) von der originellen Joseph-Mohr-Version (1816).



Noche de paz, noche de amor
Todo duerme en derredor
Entre los astros que esparcen su luz
Bella anuciando al niño Jesús
Brilla la estrella de paz
Brilla la estrella de paz

Noche de paz, noche de amor
Oye humilde el fiel pastor
Coros celestes que anuncian salud
Gracias y glorias en gran plenitud
Por nuestro buen redentor(bis)

Noche de paz noche de amor
Ved qué bello resplandor
Luce en el rostro del niño Jesús
En el pesebre del mundo la luz
Astro de eterno fulgor(bis)






Silent night, holy night
All is calm, all is bright
Round yon Virgin Mother and Child
Holy Infant so tender and mild
Sleep in heavenly peace
Sleep in heavenly peace

Silent night, holy night!
Shepherds quake at the sight
Glories stream from heaven afar
Heavenly hosts sing Alleluia!
Christ, the Saviour is born
Christ, the Saviour is born

Silent night, holy night
Son of God, love's pure light
Radiant beams from Thy holy face
With the dawn of redeeming grace
Jesus, Lord, at Thy birth
Jesus, Lord, at Thy birth "



Dulce Jesús mío





Dulce Jesús mío,
mi niño adorado,
ven a nuestas almas niñito,
ven no tardes tanto. (bis)

Del seno del padre
bajaste a humanarnos,
deja ya el materno,
porque te veamos.

De montes y valles, ven, oh deseado;
rompe ya los cielos;
brota flor del campo.

Dulce Jesús mío,
mi niño adorado,
ven a nuestas almas niñito,
ven no tardes tanto.

Del seno del padre
bajaste humanado,
rompe ya los cielos niñito,
brota flor del campo.

domingo, 13 de diciembre de 2009

Dos abuelos.



BALADA DE LOS DOS ABUELOS

Sombras que sólo yo veo,
me escoltan mis dos abuelos.

Lanza con punta de hueso,
tambor de cuero y madera:
mi abuelo negro.
Gorguera en el cuello ancho,
gris armadura guerrera:
mi abuelo blanco.

Pie desnudo, torso pétreo
los de mi negro;
pupilas de vidrio antártico
las de mi blanco!

Africa de selvas húmedas
y de gordos gongos sordos...
--¡Me muero!
(Dice mi abuelo negro.)
Aguaprieta de caimanes,
verdes mañanas de cocos...
--¡Me canso!
(Dice mi abuelo blanco.)
Oh velas de amargo viento,
galeón ardiendo en oro...
--¡Me muero!
(Dice mi abuelo negro.)
¡Oh costas de cuello virgen
engañadas de abalorios...!
--¡Me canso!
(Dice mi abuelo blanco.)
¡Oh puro sol repujado,
preso en el aro del trópico;
oh luna redonda y limpia
sobre el sueño de los monos!

¡Qué de barcos, qué de barcos!
¡Qué de negros, qué de negros!
¡Qué largo fulgor de cañas!
¡Qué látigo el del negrero!
Piedra de llanto y de sangre,
venas y ojos entreabiertos,
y madrugadas vacías,
y atardeceres de ingenio,
y una gran voz, fuerte voz,
despedazando el silencio.
¡Qué de barcos, qué de barcos,
qué de negros!

Sombras que sólo yo veo,
me escoltan mis dos abuelos.

Don Federico me grita
y Taita Facundo calla;
los dos en la noche sueñan
y andan, andan.
Yo los junto.

--¡Federico!
¡Facundo! Los dos se abrazan.
Los dos suspiran. Los dos
las fuertes cabezas alzan;
los dos del mismo tamaño,
bajo las estrellas altas;
los dos del mismo tamaño,
ansia negra y ansia blanca,
los dos del mismo tamaño,
gritan, sueñan, lloran, cantan.
Sueñan, lloran, cantan.
Lloran, cantan.
¡Cantan!

Nicolás Guillén.






"Dos abuelos".

(Milonga)

Me galopan en la sangre
dos abuelos, sí señor.
Uno lleno de silencios
y el otro, medio cantor.

Hace tiempo, mucho tiempo
que el indio ya se alejó,
con su lanza y su alarido,
su tobiano y su tambor.

El gaucho salió a buscarlo
por esos campos de Dios.
Se lo habrá traga'o la tierra,
porque tampoco volvió.

Volvió pero hecho leyenda
hecho canto y tradición.
Para que el hombre argentino
no pierda su condición.

Me galopan en la sangre
dos abuelos, si señor.
Uno lleno de silencios,
y el otro medio cantor.

Atahualpa Yupanqui.

Me matan si no trabajo



Me matan si no trabajo,
y si trabajo me matan.
Siempre me matan, me matan, ay,
siempre me matan.

Ayer vi a un hombre mirando,
mirando el sol que salía.
El hombre estaba muy serio
porque el hombre no veía.
Ay, los ciegos viven sin ver
cuando sale el sol.

Ayer vi a un niño jugando
a que mataba a otro niño.
Hay niños que se parecen
a los hombres trabajando.
Ay, quién le dirá cuando crezcan
que los hombres no son niños,
que no lo son.

Nicolás Guillén.




Un largo lagarto verde





Por el Mar de las Antillas
(que también Caribe llaman)
batida por olas duras
y ornada de espumas blandas,
bajo el sol que la persigue
y el viento que la rechaza,
cantando a lágrima viva
navega Cuba en su mapa:
un largo lagarto verde,
con ojos de piedra y agua.
Alta corona de azúcar
le tejen agudas cañas;
no por coronada libre,
sí de su corona esclava:
reina del manto hacia fuera,
del manto adentro, vasalla,
triste como la más triste
navega Cuba en su mapa:
un largo lagarto verde,
con ojos de piedra y agua.

Junto a la orilla del mar,
tú que estás en fija guardia,
fíjate, guardián marino,
en la punta de las lanzas
y en el trueno de las olas
y en el grito de las llamas
y en el lagarto despierto
sacar las uñas del mapa:
un largo lagarto verde,
con ojos de piedra y agua.

Nicolás Guillén.

Palabras fundamentales




Haz que tu vida sea
campana que repique
o surco en que florezca y fructifique
el árbol luminoso de la idea.
Alza tu voz sobre la voz sin nombre
de todos los demás, y haz que se vea
junto al poeta, el hombre.

Llena todo tu espíritu de lumbre;
busca el empinamiento de la cumbre,
y si el sostén nudoso de tu báculo
ofrece algún obstáculo a tu intento,
¡sacude el ala del atrevimiento,
ante el atrevimiento del obstáculo!


Nicolás Guillén

Guitarra en Duelo Mayor (Soldadito boliviano)





Soldadito de Bolivia,
soldadito boliviano,
armado vas con tu rifle,
que es un rifle americano.

Te lo entregó un asesino,
soldadito boliviano,
regalo de Mr. Dólar,
para matar a tu hermano.

No sabes quién es el muerto,
soldadito boliviano,
el muerto es el Che Guevara,
que era argentino y cubano,
soldadito boliviano,
y también era tu hermano.

Está mi guitarra entera,
soldadito boliviano,
de luto pero no llora,
aunque llorar es humano.

No llora porque la hora,
soldadito boliviano,
no es de lágrima y pañuelo
sino de machete en mano.

Con el money que te paga,
soldadito boliviano,
que te compra, que te vendes,
es lo que piensa el tirano.

Despierta, que ya es de día,
soldadito boliviano,
está en pie ya todo el mundo,
porque el sol salió temprano.

Pero aprenderás seguro,
soldadito boliviano,
que a un hermano no se vende,
que no se mata a un hermano.

Nicolás GUillén



Angel Parra - Guitarra en Duelo Mayor (Chile) .mp3
Found at bee mp3 search engine

Todo cambia






Cambia lo superficial
Cambia también lo profundo
Cambia el modo de pensar
Cambia todo en este mundo

Cambia el clima con los años
Cambia el pastor su rebaño
Y así como todo cambia
Que yo cambie no es extraño

Cambia, todo cambia
Cambia, todo cambia

Cambia el sol en su carrera
Cuando la noche subsiste
Cambia la planta y se viste
De verde la primavera

Cambia el pelaje la fiera
Cambia el cabello el anciano
Y así como todo cambia
Que yo cambie no es extraño

Pero no cambia mi amor
Por más lejos que me encuentre
Ni el recuerdo, ni el dolor
De mi pueblo y de mi gente

Y lo que cambió ayer
Tendrá que cambiar mañana
Así como cambio yo
En esta tierra lejana

Cambia, todo cambia
Cambia, todo cambia

Pero no cambia mi amor
Por más lejos que me encuentre
Ni el recuerdo, ni el dolor
De mi pueblo y de mi gente

Cambia, todo cambia
Cambia, todo cambia


Julio Numhauser

domingo, 6 de diciembre de 2009

Juntos




Esta tierra, este tiempo, esta espantosa podredumbre
que me acompaña desde que nací
(porque soy hijo de una patria triste
y hermosa como un sueño de piedra y sol; de un tiempo
amargo como el poso
de la historia):
esta tierra, este tiempo que tiran de mis pies
hasta arrancar los huesos a mi esperanza última,
¡ah, no podrán, jamás podrán vencerme,
porque mi mano se me va y se agarra
a otra mano de hombre y a otra mano
que me encadenan, madre inmensa, a ti!



De: Pido la paz y la palabra



BLAS DE OTERO

Poema en video: Juntos de Blas de Otero por Ketama